La ecuación es sencilla, nuestra tranquilidad depende de que alcancen los ingresos para ahorrar y para cubrir los gastos, si esta diferencia es positiva, sobrevivimos y podemos estar tranquilos, si es negativa, estaremos pidiendo prestado para terminar el mes, el problema es que permanecer en números rojos por un tiempo, se convierte en una bola de nieve que crece todos los meses, y al ser tan pesada, ya no nos va a dejar espacio para el movimiento.
Contenido:
De aquí parte la necesidad de gestionar el dinero que recibimos para administrarlo correctamente, la mayoría de nosotros es consciente de nuestro ingreso bruto (Sueldo en el caso de los asalariados), pero no calculamos los descuentos por impuestos, los gastos del día a día y la cantidad de dinero que necesitamos para mantenernos a flote, al final, estamos pidiendo prestado para poder pasar el mes.
El valor de las finanzas personales está dado por la capacidad de vivir tranquilo y de asegurar un futuro sin preocupaciones materiales… punto, si vivimos bien con menos, necesitamos un menor presupuesto, si vivimos bien con más, lo necesitamos aumentar.
Yendo a una definición más técnica, es la administración de los recursos de manera correcta, que nos permite cubrir nuestros gastos y adicionalmente y dejar un excedente para inversiones o gastos inesperados que nos dará un buen patrimonio para los últimos años de vida.
Lo primero que tenemos que hacer es saber donde estamos, con qué contamos, y decidir a dónde queremos llegar, esta va a ser nuestra ruta a seguir o nuestra planeación financiera. La verdad no necesitamos grandes conocimientos en finanzas, es algo de sentido común, constancia y mucha disciplina.
Pasos para realizar un buen presupuesto
1. Calcular nuestros ingresos reales:
Diferenciemos entre ingresos brutos e ingresos netos (Reales)
a. Los ingresos netos corresponden a todos nuestros ingresos en dinero líquido menos los descuentos de salud, pensión, retenciones que son descontados antes de realizar la transferencia a nuestras cuentas, en algunos casos contamos con subsidios que suman, y en otros casos tenemos que aportarlos para que otros se vean beneficiados, esto depende del nivel de ingreso que tengamos.
b. Es importante entender que debemos sumar los ingresos netos como grupo familiar, si los dos aportan, se deben sumar los dos ingresos.
c. Los ingresos adicionales provenientes de otras fuentes como inversiones, dividendos y todo lo que signifique un ingreso en efectivo recurrente.
2. Hacer un seguimiento minucioso de nuestros gastos:
a. Aquí está la clave para saber si sobrevivimos con los ingresos que recibimos, si ahora no lo sabemos, empecemos a hacerlo, hay aplicaciones que nos permiten hacer un seguimiento de gastos diarios sin hacer mayor esfuerzo, la aplicación debe ser rápida, práctica y en la mayoría de los casos son gratis, no necesitamos aplicaciones demasiado especializadas para seguir con este registro, también se puede hacer a mano, pero resultará más engorroso, usemos la tecnología!!. Cabe aclarar que después de definir por donde se va nuetsro dinero, podremos simplemente hacer un presupuesto a controlar que ni debe ser sobrepasado.
3. Dividir nuestros gastos entre necesarios y prescindibles:
a. Gastos necesarios: los necesarios son aquellos en los que si o si tenemos que incurrir cada cierto periodo de tiempo, estos se deben diferenciar en los mensuales como el arriendo, la cuota de la casa, la gasolina, el transporte, y los anuales, que requieren una provisión mensual correspondiente a su valor total dividido entre 12 (Número de meses del año), en este se incluyen los impuestos de las propiedades o los seguros de los carros.
b. Gastos prescindibles: Aquí recomiendo hacer una prueba de abstención, qué pasa si durante un mes o un periodo de tiempo determinado no recurrimos a este gasto, va a ser trascendental en nuestras vidas? O podremos vivir sin él mientras nuestras cuadran nuestras cuentas. Aquí hablamos de la suscripción a música, televisión, revistas, gastos diarios en café etc.
4. Por último hacer un seguimiento minucioso
Esta es la clave de la continuidad, hacer un buen seguimiento asegura que todos los meses vamos a ser capaces de analizar nuestro progreso y así podremos ir tomando decisiones en el camino, personalmente, considero que debemos montar objetivos cumplibles, ya que en este proceso, los logros cumplidos hacen un muy buen trabajo al infundirnos ánimo para seguir consolidando nuestras finanzas personales.
Ya tenemos la diferencia que necesitamos, al ingreso neto le restamos el total de los gastos, si es positiva… bien, vivimos y debemos decidir si tenemos suficiente excedente para invertir, o si pasamos por poco y no nos sobran recursos.
Si es negativa, tenemos que ser conscientes de que hay un problema, y que este problema requiere una solución:
· No ganamos lo suficiente, en cuyo caso lo único que podemos hacer es cambiar de trabajo, montar algún negocio que nos agregue dinero recurrente a nuestras cuentas, o cruzar los dedos y esperar a ganarnos la lotería o heredar una fortuna inesperada. (Nunca Pasa)
· Tenemos demasiados gastos prescindibles, debemos definir cuáles son los gastos innecesarios y empezamos a disminuirlos o a prescindir de ellos, para eso hagamos la prueba de abstensión.
Nuestro instinto se ha desarrollado para tomar decisiones desesperadas en los momentos más difíciles, cuando la probabilidad de resolver los problemas es muy baja, tendemos a crear problemas en vez de solucionarlos, por eso la salud financiera es imprescindible para progresar y por qué no, ser felices.
Preguntas relacionadas:
Cómo saber si necesito asesoría Financiera?
Qué es la planeación financiera, y para qué sirve?
Cuál es la mejor aplicación para controlar los gastos?
Comments